La posibilidad de pavimentar el tramo es de extrema importancia cuando hablamos de calidad y eficiencia en un sistema de confinamiento.
Pavimentar el local donde las cubiertas del vagón pasan trae numerosos beneficios, pues optimizan el tiempo y sus gastos.
Reduce significativamente las oscilaciones en la balanza, reduciendo la oscilación entre el tratamiento esperado y el tratamiento realizado, en consecuencia, reduciendo el desperdicio o la falta de dieta.
Aumenta la vida útil de las células de carga del vagón;
Mejora la eficiencia y la velocidad en la distribución de alimentos y facilita la limpieza de vías;
Reduce la erosión, la formación de depresiones y la necesidad de mantenimiento de carriles como grava.